CON LAS DECISIONES QUE ESTÁ TOMANDO EL INTENDENTE DANIEL MARTÍNEZ,
“NO ESTÁ HONRANDO A NUESTRA CULTURA”
María Rosa Carbajal en ‘Utopía’, 3 de diciembre de 2015.

“El teatro es el reflejo fiel de nuestra sociedad. Para que una sociedad sea libre debe ser culta, porque de otra forma corremos el riesgo de ser manejados al antojo de nuestros jerarcas de turno. Estoy planteando algo que trasciende el dinero, estoy planteando la creación de políticas culturales que determinen que una sociedad con equidad y recursos le corresponderá un teatro fragmental y dinámico. En cambio, para una sociedad decadente el teatro se desvincula en nuestra cultura ya que no tiene los suficientes recursos para emprender sus cometidos. Y tengo en qué basarme para decir lo que digo”, dijo María Rosa Carbajal, presidenta de la Asociación de Críticos Teatrales del Uruguay, al hacer uso de la palabra en el acto de entrega de los premios ‘Florencio’, desarrollado el lunes 30 de noviembre en el Teatro Solís. Invitada por Hugo Castillo a compartir ‘Utopía’, Carbajal volvió a leer la proclama y detalló las razones de sus reclamos. Transcribimos la entrevista que puede volver a escuchar aquí:
http://www.ivoox.com/maria-rosacarbajal-hugo-castillo-radio-centenario-audios-mp3_rf_9595848_1.html

 

Hugo Castillos: Estamos recibiendo con mucho gusto a la presidenta de la Asociación de Críticos Teatrales del Uruguay (ACTU) María Rosa Carbajal, a quien le damos la bienvenida, María Rosa.

María Rosa Carbajal: Muchas gracias Hugo.

 

HC: Un gusto que estés aquí con nosotros y sobre todo por el revuelo que provocaron tus palabras en la entrega de los Premios Florencio el lunes próximo pasado en el teatro Solís a las 21:00 horas cuando se realizó la gran fiesta del Teatro uruguayo y donde pronunciaste un discurso bastante, primero elogiado por el público porque según quiero recordar te interrumpieron tres o cuatro veces con aplausos en el discurso.

MRC: Parecía un discurso político.

 

HC: Sí, sí, interrumpiendo a la presidenta de los Críticos de Teatro en el Uruguay en el trascurso de lo que dijo.
Pero mucho mejor es que ustedes sepan qué fue lo que dijo María Rosa Carbajal en la noche del lunes en el teatro Solís.

MRC: Bueno, muchas gracias Hugo y voy a dar paso primero que nada a lo que dije primero, porque nosotros lucíamos esa noche una escarapela blanca.

 

HC: ¿Por qué teníamos una escarapela blanca?

MRC: El motivo, esto fue una idea de la compañera Gabriela Gómez que votamos los premios, después que terminamos de hacer las votaciones de rigor ella dijo, hoy nos tendríamos que identificar con algo. Y negra no porque la violencia doméstica y roja no, y rosada porque es el cáncer de mama. Y bueno, dijo, ¿y blanca? Y nos pareció bien porque el blanco es un símbolo de pureza y a mí se me ocurrió decir que hoy los críticos del jurado -por el día lunes- llevamos una escarapela blanca como símbolo de luz para nuestro teatro y de esperanza en las gestiones del Departamento de Cultura de la Intendencia.
Se me ocurrió que podía ser algo así como algo simbólico como que nosotros estamos apoyando a este fragmental movimiento teatral que tenemos y esa escarapela blanca, no hablo de un símbolo de paz pero sí de pronto de entendimiento que pienso que en algún momento se va a tener que dar porque esto no puede continuar en estas circunstancias.
Y bueno, luego di paso a las palabras que tú escuchaste.

 

HC: Que todos escuchamos y que fueron muy bien recibidas por parte del público con aplausos cerrados de un teatro Solís lleno de bote a bote.

MRC: Como hacía años que no estaba.

 

HC: Como hacía años que no veíamos en una entrega de los Premios Florencio.

MRC: Sí, sí.
No sé si querés que pase a la lectura.

HC: Sí, pasá a la lectura y después continuamos.

MRC: "Hoy es 30 de noviembre de 2015, día de honda importancia para el teatro uruguayo, hoy se entregan los Premios Florencio a lo mejor de nuestro teatro. Este Premio Florencio fue ideado por mi colega y queridísimo amigo Yamandú Marichal un 22 de setiembre de 1962 cuando existía el Círculo de la Crítica.
Y pasaron ya 53 años de ese histórico día, Marichal era Secretario de Actas y junto a él estaban entre otros Ángel Rama, Jorge Pignataro Calero y una pléyade de ilustres críticos que hoy ya no nos acompañan.
Este premio único que tiene esa permanencia en la historia de nuestra cultura, recibió el desdén de la Intendencia de Montevideo (IMM). El Departamento de Cultura actual, a cuyo frente se encuentra la profesora Mariana Percovich, negó la asignación que año tras año ese Departamento nos otorgara para la confección de las estatuillas.
Debemos recordar a la nueva administración que en período anterior al frente de cuyo departamento estaba el señor Héctor Guido, éste había impulsado con gran entusiasmo la institucionalización de los Premios Florencio con la anuencia y aprobación de la ex intendenta profesora Ana Olivera.
Esta administración desconoce este Decreto, pero nosotros nos plantamos aquí y decimos que los Premios Florencio fueron declarados de interés municipal e institucionalizados, y el desconocimiento de esto es grave para un premio con la trayectoria que este tiene. Deseamos que esto sea revisado.
Contamos sí con el valioso aporte del Ministerio de Educación y Cultura (MEC) en la persona de su ministra, María Julia Muñoz, y su director de Cultura, Sr. Sergio Mautone, Ministerio al cual fue derivado dicho aporte.
Sin lugar a dudas estamos atravesando uno de los momentos más duros para nuestro teatro. Teatro que jamás bajó los brazos, tesonero, audaz, creativo, propulsor de nuevas ideas. Por eso le digo a usted, Ing. Martínez, que con las decisiones que usted está tomando en referencia al destino de nuestro teatro, no está honrando a nuestra cultura, porque honrar a nuestra cultura es justamente honrar a sus protagonistas, los artistas. Y en este caso específico, a la gente de teatro.
Teatro que es nuestra expresión artística por excelencia. Ellos son nuestros indispensables y me niego en forma rotunda a relegar a nuestra cultura al rol de la parienta pobre, a recortarla, a quitarle el oxígeno que un plan como el fortalecimiento de las artes le aportó.
Le confieso, intendente, que somos del mismo palo pero con concepciones muy diferentes del socialismo. En mi sistema social y económico la organización se basa en la propiedad y administración colectiva o estatal de los medos de producción y distribución de los bienes. Eso no es lo que se está haciendo en el Departamento de Cultura de la Intendencia.
En mi concepción de socialización de la sociedad y su cultura se impone la obligación de nivelar siempre hacia arriba. Lo que implica desde mi sentir y perspectiva socialista, lograr la equidad y fomentar fuentes culturales que nos enriquezcan y nos hagan crecer día a día. Por lo que observo usted y yo no tenemos la misma visión de la cultura y de sus actores.
¿Hay muchas formas de socializar la sociedad? Yo se lo respondo, no, una sola, cultura, cultura, cultura y siempre más cultura. Este es nuestro capital porque da trabajo, dignifica al ser humano. El teatro es el reflejo fiel de nuestra sociedad.
Para que una sociedad sea libre debe ser culta, porque de otra forma corremos el riesgo de ser manejados al antojo de nuestros jerarcas de turno.
Estoy planteando algo que trasciende el dinero, estoy planteando la creación de políticas culturales que determinen que una sociedad con equidad y recursos le corresponderá un teatro fragmental y dinámico.
En cambio, para una sociedad decadente el teatro se desvincula en nuestra cultura ya que no tiene los suficientes recursos para emprender sus cometidos. Y tengo en qué basarme para decir lo que digo.
Todos los que estamos aquí hoy deseamos lo mejor para nuestra sociedad. Uno de los derechos humanos inalienables junto con la educación, la salud, la vivienda y la alimentación que es el pilar de todo esto, es el trabajo de nuestros compatriotas.
Y con el monumental recorte que se le pretende hacer al programa de fortalecimiento de las artes, se está dejando sin más ni más sin trabajo a los hacedores de nuestra cultura.
Y como si esto fuera poco, nuestras salas teatrales, baluarte de las realizaciones, corren el riesgo de cerrar sus puertas. Salas que con el esfuerzo se mantienen abiertas brindando día a día su programación.
Y como si esto fuera poco, y ahora me dirijo a ustedes, a los espectadores y vecinos de Montevideo, que quedarían sin espacio de recreación y sus barrios sin la llegada de los distintos grupos teatrales. Grupos que se nutren de la alegría y el aplauso de un público que no estaba acostumbrado a que esto ocurriera.
Y a ti joven que quizás tengas tu primera experiencia viendo una obra teatral y descubras un mundo de magia y encanto, a ti también, si esas salas se ven obligadas a cerrar sus puertas te estarán quitando la posibilidad de entrar, permanecer y crecer en el mundo del teatro y conocer así a sus actores, directores, dramaturgos y técnicos.
Esto sabemos que no es justo, sabemos que juntos podremos cambiar esta realidad. Los críticos también integramos el colectivo teatral y junto a ustedes nuestros artistas lucharemos para revertir esta situación.
¡La lucha recién comienza, luchar hasta vencer!
¡Larga vida al teatro uruguayo!
¡Salud compañeros!"

 

HC: Bueno, y eso se cerró con una ovación tremenda del teatro Solís colmado de gente.

MRC: Sí, muy emotivo.

 

HC: Claro, muy emotivo supongo. Tú que fuiste la que lo leíste, ¿sentías el calor del público?

MRC: Sí, ahí uno siente, cuando hace cosas que no son habituales como estar sobre un escenario, uno ahí se da cuenta de lo que debe sentir el actor o cualquier artista que esté sobre un escenario, puede ser un bailarín, puede ser un cantante.
Uno cuando siente el aplauso es porque es algo impactante, es algo que llega muy fuerte. Vamos a entendernos, yo no iba a buscar aplausos, yo iba a decir lo que lo que el colectivo de ACTU sentía y además estaban todos más o menos en conocimiento del tenor que iba a tener el discurso.
Y no imaginé sinceramente, a mí me emocionó, como uno vulgarmente dice, se me puso la piel de gallina porque fue muy emotivo, sentí que uno estaba diciendo las cosas que ellos verdaderamente sentían.
Y que uno no estaba, porque es muy fácil, como yo siempre digo, en una fiesta todo es risa, pero el tema es que estábamos en una fiesta del Teatro sí porque íbamos a dar premios, pero no era sólo eso, había algo más, detrás de esas premiaciones había gente que estaba sufriendo una situación que no saben cómo la van a poder solucionar, porque es muy difícil solucionar esto.

 

HC: Ya hay eco de eso que tú dices, un grupo de teatro ya anunció que cierra sus puertas.

MRC: Eso es terrible.

 

HC: Terrible, después de 30 años de funcionamiento la Italia Fausta, por ejemplo, anunció que deja de.

MRC: La Italia Fausta ya no funciona más.
Creo que es algo muy arbitrario por parte de la misma gente responsable de la Sala, porque la Italia Fausta marcó un hito sin lugar a dudas y toda su gente, maravillosa toda, le dieron vida a dos salas que no existían.

 

HC: Y llevando sobre todo a gente joven, multitudes de gente joven.

MRC: Y llevando muchísima, porque yo he visto los últimos trabajos, tanto de ellos como de grupos invitados, además un teatro que convoca. Porque hay una cosa que es importante decir, hay salas que convocan público continuamente, continuamente. Y las salas todas a las que yo he ido de teatro independiente, todas han leído la carta de FUTI (Federación Uruguaya de Teatro Independiente) y SUA (Sociedad Uruguaya de Actores) y explican, y ahora la gente pregunta cuando leen la carta, que eso antes la gente escuchaba en forma pasiva.
El otro día, digo la sala porque es una sala teatral "La Gringa", que tiene una corriente de público brutal.

 

HC: También de gente joven fundamentalmente.

MRC: Álvaro Correa, que es el que está frente de la sala con su esposa Virginia Marchetti, explicaba el problema, más que leer la carta él lo decía con sus palabras y decía el problema que iba a ser poder continuar con la sala abierta y el público empezó a interactuar, a preguntar. ¿Pero también va a pasar con danza, con música? Sí, con todos.
Bueno, dice, ahora es el momento de que ustedes espectadores también nos den un empujón, una mano.

 

HC: Exactamente, exactamente.

MRC: Porque también ellos se van a ver privados. La gente que tiene distintas tarjetas para acudir al teatro, los jóvenes que tienen una nueva que surgió ahora, va a quedar sin funcionamiento y esa gente no puede, hay mucha gente que no puede pagar una entrada de teatro. Sabemos que nosotros no tenemos entradas costosas, pero sabemos que pueden pagarla una vez al mes.
En cambio con esas tarjetas que tienen un valor pequeño, o convenios que se han hecho con maestros, pueden acceder. Entonces, estamos recortando no sólo programa, estamos recortando cultura a la gente, eso es lo que me preocupa.

 

HC: Exacto, así es, María Rosa.

MRC: Esa es la preocupación que yo tengo.

 

HC: Bueno, ecos inmediatamente después del lunes se produjeron en los medios informativos, en la prensa escrita y oral, nosotros hemos dado noticias de ello y te tenemos aquí para que supieran de primera mano, de primera línea qué fue lo que pasó el lunes en el teatro Solís con este discurso de la presidenta de la ACTU.
Aparte de todo, una fiesta realmente formidable...

MRC: Hacía mucho tiempo, yo se lo comentaba a Yamandú y a ti también cuando estábamos atrás del escenario, les decía: yo hace tanto tiempo que no veo los anillos, tres anillos del Solís con público.

 

HC: ¡Años!

MRC: Cuando nos dijeron tienen que hacer este sistema de Tickantel y eso, yo dije, bueno, quedarán entradas, no vendrá gente.
Es más, me comentó el dramaturgo Dino Armas que yo fui a ver el domingo anterior a esta ceremonia...

HC: Premiado, que fue premiado...

MRC: Exacto, que fue premiado por nosotros, por sus 50 años de brillante trayectoria.
Me comentaba que unas amigas de él habían llamado al Solís, y yo pensé, no, le habrán gastado una broma.
Y le dicen: -¿Dónde vive usted señora?
-En el Cordón.
-No, mire, no se moleste en llegar porque hay una cuadra de gente para retirar invitaciones para la ceremonia del Florencio. No va a llegar señora.
Y yo dije, esto es broma. Pero la verdad, cuando vi, porque Tickantel automáticamente manda tanto a mi correo como al de Myriam Caprile, digo, yo no estoy acostumbrada a leer estas cosas, pero acá lo único que queda libre son los dos palcos, el de Presidencia y el municipal. O sea, eran 24 localidades que no fueran ocupadas.
Entonces,  me habla de no, mirá que a lo mejor no porque las emitieron todas. Pero verdaderamente me llamaron nominados a las 4:30, 5:00 de la mañana que no tenían localidades, porque habían arrasado con todo.
Es una cosa inusual, creo que hubo como una comunión de la gente de teatro en esta fiesta que, lo digo sin pedantería pero es la más importante del teatro sin duda...

 

HC: Sin lugar a dudas.

MRC: Y creo que hubo como una hermandad, una comunión entre los grupos porque fueron grupos de teatro enteros, como quien dice fue todo El Galpón, el teatro Victoria, fueron en bloque y como que se notaba toda esa gente.

 

HC: El fervor, el calor que transmitían, nosotros que estábamos en el escenario lo sentíamos eso.

MRC: Lo sentíamos, sí, sí, lo sentíamos. Y además había un clima festivo por un lado y de preocupación por otro que lo transmitieron todos los que ganaron, más o menos duro el discurso pero...

 

HC: Pero casi todos se refirieron al hecho.

MRC: Todos sabíamos porque a mí me habían dicho, mirá María Rosa que cuando la gente suba al escenario...
Les digo, sí, la tenemos clara, este es un año muy difícil y van a tener su queja y su reclamo como corresponde, como cualquier persona lo hace.
Y bueno, del otro lado hay que recibir las cosas como vienen. Si no se quieren las críticas, bueno, hay que reunirse, hay que hablar, hay que buscar salidas. Mientras esto no pase este tipo de manifestaciones van a seguir.

 

HC: Por supuesto que sí.
Y hasta ahora han pasado 3 días de este discurso, del acto del lunes en el teatro Solís y lo que sabemos es que las autoridades han dado el silencio por respuesta.

MRC: Hasta el momento no hay, incluso yo estoy en comunicación generalmente con la gente de SUA para ver qué pasa, con la gente de FUTI, si hay alguna novedad y hoy me comuniqué, porque justamente voy a la Radio, al programa de Hugo Castillos y quiero saber.
No, de momento nada, porque el tema es que acá no es, creo que hay una confusión y esto no se va a desentrañas hasta que alguien explique con claridad. Acá el tema pasa por la política de instrumentación de este programa.
Mientras no se desentrañe la política educativa o cultural que entraña este programa, y hasta que no lo pongan sobre la mesa y dejen explicarlo con claridad para entenderlo, porque yo creo que más allá de la voluntad que tenga el ingeniero Martínez, él de esta parte creo que no entiende.
Y por el otro lado creo que el Departamento de Cultura está muy inflexible. Entonces, creo que, no veo una salida inmediata, veo de pronto que se tendrían que sentar más de una vez y desentrañar todo este programa y explicarle uno a los otros cómo es el funcionamiento.

 

HC: Y por qué tomaron esa medida inconsulta.

MRC: Y además, de un lado de pronto explicarlo y del otro lado explicar qué es lo que pasa, porque según tengo entendido es un programa que fue aprobado por la Junta, no es un decreto que hoy viene.
Está bien, me dirán, bueno, como aprueba desaprueba. Sí, perfecto, pero si aprobó, si está aprobado, si tiene anuencia también de la Junta Departamental, no es un decreto al barrer.
Entonces, digo, esto hay que tomarlo con pinzas, me parece y tener la reflexión suficiente como para tratarlo y no decir este programa no y lo recorto.

 

HC: ¿Pero cómo va a tomar una medida como esa, la Intendencia en este caso, sin consultar a los interesados en el tema?

MRC: Y no queda otra. O sea, la única forma que hay cuando hay dos personas que están, no digo enfrentadas pero que están con concepciones diferentes de algo, bueno, sentarse a dialogar y de alguna manera.

 

HC: Hasta ahora no ha habido el mínimo gesto por parte de las autoridades.

MRC: El lunes tengo entendido que estaba muy dura la cosa, tengo entendido que había como un gesto un poquito más flexible del lado del intendente, no así del Departamento de Cultura. Y así de esta manera como que no veo.

 

HC: Departamento de Cultura que está a cargo de Mariana Percovich.

MRC: Exactamente.
Y no veo la manera, si siguen en esa tesitura, por un lado veo que la gente de teatro tiene la preocupación, pienso que no se va a quedar quieta porque pienso que están todos pensando, más allá de que estén contentos los que ganaron, los premiados, están con el problema de que se viene el 2016 y tienen que reponer las cosas, las salas tienen que seguir funcionando y se tiene que seguir pagando. Porque es como una casa, ahí hay luz, hay agua, hay gastos fijos, la luz son millonadas de plata y hay que mantener la sala en condiciones. El Victoria estaba con un problema muy serio también de desfinanciamiento por este mismo problema que estaba, bueno, yo los veo normalmente porque son amigos en Facebook y lo vi que estaban preocupadísimos, que era una cosa terrible. Ellos ya tenían problemas con su sala y más ahora.
Y ahora El Circular, El Galpón, y además toda esta gente, hay que pensar que no sólo es un tema de salas, toda esta gente con las salidas a los barrios, con las salidas al interior, todo eso, eso es un aporte.
Y pensemos que acá la única gente que tiene un sueldo fijo y que vive de eso es la gente de la Comedia Nacional. Que me parece perfecto que así sea, no los estoy criticando a ellos, pero digo que son los únicos actores que tienen una estabilidad.
Después sabemos que todos los demás corren de un trabajo a otro y después hacen las funciones. Pero digo, eso era un respiro para muchos.
Entonces, creo que hay mucha cosa, mucha cosa, esto es una cosa mucho más compleja que hablar y decir que es un programa tal. Acá hay que hilar muy fino y hay que reunirse las veces que sea necesario para tratar de que esto tenga una salida conveniente para todos.

 

HC: Y sobre todo sabiendo que en este caso la ACTU está abierta a cualquier planteamiento y los actores en general y la gente del teatro.

MRC: Y los actores saben que nosotros apoyamos sus causas como entenderíamos también si hubiera una salida sensata del lado de la Intendencia, entenderíamos sus argumentos como entendemos los otros. Digo, no es que estemos en contra, estamos apoyando a quien está trabajando y ve en riesgo su trabajo.

 

HC: Pero por supuesto. Y no se puede estar hablando de defensa de la cultura permanentemente como hacen las autoridades y por otro lado restándole posibilidades de realización. Eso no se puede permitir.
Y supongo que la gente del teatro como la gente del cine, mirá lo que pasa con Cinemateca, así pasa también con el teatro y después se hacen gárgaras con la palabra cultura.

MRC: Exacto, es un gran problema.
Digo, tenemos que ser coherentes con el discurso, o sea, no podemos tener doble discurso. Si yo apuesto a la cultura, quiero que mi país siga siendo un país que tenga una cultura elevada y que se puedan seguir haciendo buenas realizaciones, que puedan seguir saliendo al exterior. Porque ojo que nuestro teatro sale mucho al exterior, es muy alabado. Y bueno, entonces, nosotros queremos que eso siga pasando. Pero lo que pasa que no podemos seguir pensando en eso si hay recortes profundos.

 

HC: Creo que tu participación el lunes en la entrega de los Premios Florencio fue un toque de atención, un toque de alarma claramente expuesto a las autoridades poniendo y planteando el problema realmente serio en el que estamos embarcados.

MRC: Lo que esperamos es que el eco que tenga no sea el eco de enojo sino de reflexión y que entiendan que esto tiene que tener sí o sí una salida porque es una salida provechosa para todos. Tanto para el Departamento de Cultura de la Intendencia como para la gente de Teatro.
Y acá no es que nosotros nos pongamos en jueces de nadie sino que estamos evaluando una situación que se presenta.

 

HC: Totalmente de acuerdo.

MRC: Y bueno, nosotros queremos que pase lo mejor y que todo salga bien, pero para eso hay que sentarse, dialogar, llegar a un acuerdo y pensar en la fuente de trabajo y en la generación de nuevos recursos.

 

HC: Sobre todo la gente de trabajo, la gente que trabaja para el teatro, la gente que hace, pero cantidad de gente.

MRC: Hay montones de gente, cantidad.

 

HC: Y le están cortando esa posibilidad.

MRC: Y eso no es posible, eso hay que reflexionar, volverlo a pensar y una salida pero una salida que tenga coherencia. Eso es lo que esperamos.

 

HC: Muy bien, yo te agradezco muchísimo María Rosa que hayas venido aquí a la tarde de Utopía a contarnos todas estas cosas.
¿Qué esperas?

MRC: Y bueno, yo la esperanza que tengo es que el 2015 no cierre de una manera triste y solitaria para el teatro. Yo espero que, por lo menos, si no hay una gran resolución en estos días de diciembre antes del 31 o del 1º de enero, por lo menos que quede planteada la posibilidad de una buena propuesta, una charla que lleve una buena propuesta para que sigamos teniendo teatro de calidad.
Y que nosotros podamos seguir premiando teatro, porque de otra manera nosotros vamos a quedar muy aislados junto con la gente de teatro. Pero también creo que es como yo digo, hay que dar la batalla, hay que seguir adelante y seguir luchando.

 

HC: Estamos dispuestos, creo yo la gente de teatro, a dar esa batalla.

MRC: Sí, cómo no. Yo creo que se va a ganar porque tiene que ser así.

 

HC: Bueno, así lo esperamos todos.
Te agradezco mucho que hayas venido aquí a la tarde de Utopía en CX 36 Centenario.
Aquí estuvo perfectamente claro el discurso de la presidenta de ACTU, María Rosa Carbajal, expuesto aquí en la tarde de Utopía.
Muchas gracias.

MRC: Gracias a ti Hugo.